Ya se ha publicado el Índice General de Producción Industrial (IPI) en España para el mes de septiembre y los resultados no podían ser más esperanzadores. Con una subida que se acerca al 3,5% da buena muestra de lo que se viene viviendo durante los últimos meses en lo que respecta a los bienes de consumo no duradero.
Lo cierto es que, frente al crecimiento lento de agosto, que se situó en el 0,3%, los resultados de septiembre que se sitúan en el crecimiento interanual del 1% parece que la producción en España va encadenando meses que, al margen del propio indicador estacional, dan esperanza a una recuperación lenta pero firme en el sector.
Pero esto es sólo un indicador más de la época que sobreviene a Europa. España es sólo un ejemplo, ya que Alemania también ha mejorado en sus últimos datos publicados las exportaciones, sobre todo a terceros, es decir, a países fuera de la Zona Euro, dando así pie a dejar durante un tiempo de lado la sombra de un retroceso en la recuperación económica de la Unión Europea.
Los observadores de la zona, entre los que se encuentran Versus Wealth Management, Goldman Sachs o JP Morgan, auguran un buen 2015 para los inversores que pongan sus vistas en los países de la Unión Europea, aunque asumen que avanzar lo que va a pasar durante los próximos meses se hace complicado por la volatilidad que vienen sufriendo todos los escenarios internacionales.
Lo cierto es que Estados Unidos lleva tiempo mostrándose más fuerte que esta zona que, a pesar de las sombras que ha ido acarreando los últimos meses, ve cómo las medidas que ha implantado el Banco Central Europeo han servido para contrarrestar el frenazo de la recuperación y su ralentización. De ahí que posiblemente, a medio plazo, sea un escenario perfecto para volver a hablar de un mercado y una divisa estables.
De hecho, ante la previsión de que la Reserva Federal de Estados Unidos vaya retirando las medidas expansivas que puso en marcha mucho antes que otros países como Japón o que el propio Banco Central Europeo, se ve claro que serán otros los mercados que se beneficiarán también con la nueva política americana, haciéndose incluso más competitivos que la misma.
Los mercados, además, tienen mucho que esperar del próximo año, entre ellos la subida de tipos desde la Reserva Federal que se espera próxima y también de los resultados que irá impulsando Europa con la nueva Unión Bancaria puesto que las medidas económicas de mejor calado ya se han puesto en marcha y tan sólo falta esperar para conocer sus resultados.
